El pasado viernes 9 de agosto, a las 09:13 horas, una avioneta despegó desde el aeródromo de Coyhaique con destino a Chile Chico, un trayecto que usualmente dura aproximadamente 30 minutos. A las 13:44 horas se confirmó el hallazgo de los restos de la aeronave, la cual se había estrellado en el sector de Las Horquetas, cerca de Villa Cerro Castillo. Todos los ocupantes, incluyendo los seis pasajeros y el piloto, fallecieron en el accidente.
El Gobierno de Chile declaró tres días de duelo regional. Este trágico accidente ha puesto en evidencia una de las problemáticas más graves de la región de Aysén: la desconexión del resto del país. El hallazgo de la avioneta tuvo que ser realizado por empresas privadas, debido a que el helicóptero de Carabineros no estaba disponible en la región en ese momento, y la Fuerza Aérea de Chile (FACH) tuvo que desplegar aeronaves desde Santiago, Temuco y Puerto Montt.
Chile Chico se encuentra a 381 kilómetros de Coyhaique, y se puede llegar a través de tres vías: por aire, por agua o por tierra. Viajar por carretera implica tomar la Carretera Austral y bordear el Lago General Carrera, una ruta que toma entre 7 y 8 horas, mientras que la opción por agua, utilizando una barcaza desde Puerto Ibáñez, tiene un tiempo similar. Accidentes como este demuestran la fragilidad y las condiciones extremas que enfrenta esta región, evidenciando el abandono que sufre por parte de las autoridades.