12 años de lucha para el reconocimiento de la diversidad familiar.
No fue de un día para otro. Tampoco el resultado de un único proceso. Para llegar hasta la promulgación del Acuerdo de Unión Civil (AUC) en Chile, hubo que promover y consolidar cambios sociales, culturales, políticos y económicos. La Unión Civil permite regular la convivencia de parejas tanto del mismo como de diferente sexo. De hecho, de acuerdo a un balance realizado por el Ministerio de Justicia, un 60% de las horas solicitadas durante el mes de julio corresponden a parejas heterosexuales.
De esta forma, luego de más de 12 años de que ingresara al Congreso Nacional el primer proyecto que buscaba regular las uniones de parejas del mismo sexo, Chile logra unirse al grupo de cuarenta países donde parejas del mismo sexo pueden regularizar su convivencia. En el mundo, 40 países cuentan con legislaciones que permiten las uniones entre parejas del mismo sexo. 23 contemplan el matrimonio y 17 uniones civiles.
Para las organizaciones de la diversidad sexual, la Unión Civil constituye un «primer paso» hacia el matrimonio gay, argumentándose que muchos de los países que cuentan con esa legislación partieron por regular las uniones de hecho.