La preocupante realidad de los terrenos de humedales en Valdivia
Por Pablo Salvo
Un término bastante común al momento de mencionar los humedales de Valdivia es la acción denominada “loteo brujo”, hecho que se denunció por primera vez ante las autoridades municipales en 2006 por parte de diversos movimientos ciudadanos de la época que aún siguen manifestando su descontento ante esta lamentable situación. Los loteos brujos consisten en terrenos agrícolas que son adquiridos legalmente por una persona particular, pero que termina siendo subdividido y vendido de manera irregular para que los nuevos propietarios construyan viviendas.
Asimismo, esta no es la única amenaza que afecta actualmente a los humedales, de la misma forma existen los rellenos ilegales, que consiste en el aumento del tamaño de metros cuadrados, de manera artificial y dañina para el medio ambiente, de una superficie para posteriormente venderla como terreno apto para construcción de propiedades. Dichos rellenos varían desde neumáticos, basura, desechos tóxicos, etc no solo realizando un daño al medio ambiente y biodiversidad local, sino que violando diversas leyes de Vivienda y Urbanismo debido a la creación de superficies inestables no aptas para la construcción de viviendas y edificios.
Actualmente, Chile no cuenta con una legislatura adecuada para la correcta protección de estos espacios de biodiversidad, sin embargo, a mediados de agosto del presente año, el presidente de la Republica Sebastián Piñera y la Ministra del Medio Ambiente Claudia Schmidt, presentaron el Plan Nacional de Protección de Humedales (2018-2022). La iniciativa tiene como objetivo detener el deterioro de estas áreas y preservar su biodiversidad, priorizando una cantidad de 40 humedales para resguardar a lo largo del país y que suman más de 250.000 hectáreas.