La demanda territorial de las comunidades Mapuche es una constante en la agenda de los distintos gobiernos de turno. Pero esta no ha podido ser resuelta aún, pese a existir la Ley Indígena 19.253 promulgada por el presidente Patricio Aylwin el año 1993.
A mas de 20 años, en términos de números es mínimo lo que se ha avanzado, en comparación con la cantidad de hectáreas que se encontraba en manos del pueblos Mapuche antes de la ocupación militar a su territorio a fines del 1800.
Del total de 10 millones de hectáreas esta se redujo a menos de 500 mil en un lapso de no mas de 30 años, a su vez , luego de sucesivas reformas agrarias y corridas de cercos, en los años 70 la posesión efectiva de tierras mapuche no superaba las 300 mil hectáreas, según da cuenta el historiador Martín Correa en su libro «Las razones del Ilkun (el enojo)».
Recuperada la democracia, luego de los oscuros años de dictadura, los gobiernos de la concertación y la derecha, no han sido capaces de resolver esta demanda en términos políticos y han seguido con el uso de la fuerza represiva, lo que ha significado el casi nulo avance en restitución territorial.