Siempre se suele asociar las regiones aledañas al centro de Chile como lugares tranquilos, si de delincuencia se trata, y Valdivia no escapa de estas descripción. Pese a esto, como toda ciudad, posee sectores pacíficos y otros sectores conflictivos, lo que llega a generar las siguientes preguntas: ¿qué tan conflictivo son estos sectores? ¿Realmente es tan peligroso como lo presenta la prensa? ¿Será real que los vecinos no pueden vivir tranquilos? Estas preguntas surgen cuando se habla de “la Norte Grande”, población ubicada en el sector de Las Ánimas.
No es una novedad que en Chile existen muchos lugares conflictivos con altos índices de delincuencia donde (la mayoría de las veces) domina la ley de las balas y el más fuerte. Sin ir más lejos, la población “La Legua” representa la descripción anterior, no hay que ser un erudito en la historia social chilena para saber lo conflictivo que puede ser esta zona donde una pequeña comunidad se rige por una narco-democracia que intimida hasta a las organizaciones encargadas del resguardo de la estabilidad social.
Tanta es la fama de este lugar que sea a llegado a usar como ejemplo para referirse a otros lugares dentro del país, produciendo inmediatamente, un rechazo social que establece los límites de las oportunidades laborales y de vida para muchas personas que viven ahí.
En Valdivia, uno de estos sitios es la Norte Grande ubicada en el sector Las Animas. Desde pequeño a muchos se nos dijo que en este lugar abundaba la delincuencia y el narcotráfico – “No vayas por ahí de noche” – decía mi mamá. Las advertencias sobre este lugar nunca faltaban cuando se nombraba.
Pese a ello, esta situación no es “blanco o negro”, existe una contraparte de las opiniones vertidas por la sociedad de Valdivia. Tanto organizaciones externas como internas de la comunidad afirman que todo este estigma social se produce por un control mediático que tiene a los habitantes de este sector tachados de delincuentes y peligrosos.
La “Norte Grande” y la Policía de Investigaciones
“Siempre me ha llamado la atención este lugar, porque históricamente son muy organizados en los proyectos que se proponen y laboralmente me ha tocado conocer los problemas que los afectan a ellos.” Así describe Consuelo Peña, Subprefecta en las dependencias de la Prefectura Provincial Valdivia, el sector de la Norte Grande.
Graduada de Investigaciones Criminalísticas en la Academia de Estudios Policiales de la PDI, el 2017 asumió su actual cargo en el sector. Es una de las encargadas de las problemáticas que surgen. Sin embargo, además de lo anteriormente mencionado, conoce la historia del sector, como nace la norte grande y como son, en promedio, los vecinos del lugar.
En base a la venta de drogas, si bien este sector es uno de los que más índices de narcotráfico concentra dentro de la ciudad, Peña explica que la mayor parte de las denuncias se deben a la misma acción de los vecinos que informan los distintos hechos delictivos que ellos presencian. Además, según indican la Subprefecta, es poco frecuente que en el día a día se vean este tipo de actos. Incluso, algo que destaca es el enfoque delictual que le dan los medios del sector, omitiendo actividades comunidades que se realizan en el lugar.
Las consecuencias de la prensa para la población
Al introducir en la barra de búsquedas de Google: “Norte Grande Valdivia”, la primera página son únicamente noticias policiales que relatan allanamientos y/o episodios de violencia dentro del sector. Esto provoca una estigmatización desde los ciudadanos de Valdivia hacia la población, pues recalca los hechos delictivos del lugar.
Victor Rebolledo, que lleva un año trabajando como auxiliar en el Centro Comunitario Norte Grande después de haber prestado servicios como guardia al CESFAM Las Ánimas, se encuentra de turno en el recinto mientras se realizan distintos talleres en los que participan vecinos de todas las edades.
Cuando se le pregunta por la relación entre la Norte Grande y la delincuencia que presenta la prensa, apenado, respondió que si bien existen un grado de delincuencia mayor que en otras poblaciones de Valdivia esta no se acerca a la realidad que pinta la prensa local.
Esto a producido que los vecinos del lugar, omitan dónde viven, pues en ciertos lugares de trabajo, los limitan tachándolos de delincuentes. Esta estigmatización nacida en Valdivia ha llegado a generar cesantías entre los habitantes del lugar. Victor Rebolledo afirma que los prejuicios han sido un impedimento para el desarrollo del barrio. Además, critica por un lado al enfoque mediático que genera la prensa y, por otro lado, a los ciudadanos que no se informan pese a tener los hechos frente a ellos de que la población no es como se presenta en la prensa.
Las actividades de un población como cualquier otra
Desde el 2010 formó parte del cuerpo de enfermeras en el Centro Comunitario de Salud Familiar (CESCOF) Norte Grande y, actualmente, Carolina Cárdenas es enfermera en el CESFAM Las Ánimas. Con el paso de los años ha generado estrechos lazos con los habitantes de este sector que le han proporcionado una perspectiva distinta a la compartida por el común de los valdivianos.
Posterior a la creación del CESFAM Las Ánimas en 2017, el personal perteneciente al CESCOF se trasladó hacia unas nuevas instalaciones y el equipo de salud vio la oportunidad de transformar la antigua edificación en un centro comunitario para los habitantes de la Norte Grande con el objetivo de apostar al desarrollo integral de las personas no sólo por medio de la salud, sino que, además, a través de nuevas formas de acompañamiento a las familias, explica Carolina.
Cárdenas manifestó que, es necesaria la participación de la comunidad desde la salud u otra área, para que se convenzan de qué estos espacios tienen el objetivo, por un lado, de fortalecer la comunidad interna, pero por otro, cambiar nuestras miradas respecto al sesgo social que existe en Valdivia
Actualmente el Centro Comunitario Norte Grande está abierto desde las 10 hrs. hasta las 19 hrs. y dentro de las instalaciones se realizan diversos talleres para la comunidad como son los cursos de barbería, talleres de tela y acrobacia, una escuela de futbol, entre otras muchas actividades.
“La Norte Grande”: una comunidad potente, activa y solidaria
“Es una comunidad potente, activa, solidaria. Hay sueños para lograr bienestar social y esto se ve en los fuertes vínculos entre vecinos.” Afirma Carolina Cárdenas. A Carolina, le motiva las personas con las que se encuentra día a día, compartiendo su vida así como las personas le comparten parte de la suya, sin miedo.
Cárdenas, al igual que Rebolledo, afirman que la segregación social es una limitación para un sector que contiene una comunidad opacada por un control mediatico, la cual se esfuerza dia a dia para crear actividades con tal de fortalecer la comunidad y ser escuchados por la sociedad valdiviana por medios de programas que estrechan los lazos entre la comunidad.
Los medios son una gran herramienta para la visibilización de la contigencia nacional y una variedad de acontecimientos que ocurren en el mundo con la posibilidad de transmitir todo esto en la instantaneidad pero, pese a esto, pueden jugar un rol decisivo en la visión que se tiene hacia un un estrato de la sociedad limitandolo sus posibilidades de vida. ¿Se necesitará una regulación para los medios de comunicación?