Un 04 de julio de 2015 se escribió una de las páginas mas importantes en la historia del deporte nacional. Luego de años de triunfos morales, llegó la consagración para la selección chilena de futbol. En Santiago, los dirigidos por Jorge Sampaoli derrotaron en lanzamientos penales a la poderosa Argentina de Lionel Messi, que venía de disputar la final del mundo el año anterior.
En la cuadragésima cuarta edición, los chilenos eran los principales favoritos para quedarse con la máxima competencia futbolística entre selecciones de América del Sur, por ser locales y también por el gran momento deportivo por los cuales atravesaban sus jugadores. Sin embargo, el inicio fue duro por polémicas de indisciplina con el famoso «no fue culpa mía» y también por dudas en el rendimiento, que poco a poco se fue disipando.
Sin duda, la Copa América fue inolvidable para la generación dorada, que además de quedarse con el torneo, enamoró al mundo por su buen fútbol y los grandes resultados obtenidos. A pesar de los problemas en el inicio, los de Sampaoli supieron reponerse y reinar el balompié del continente.