Son cada vez más las personas que en Chile sufren algún problema de ansiedad o depresión, es por esto que pacientes y profesionales de la salud mental no están de acuerdo con el bajo aporte público para esta área. El malestar se hace sentir entre quienes reciben una atención de menor calidad a diferencia de aquellos pacientes que acuden a medicina general o especialidades.
Según datos de la Organización mundial de la salud en 2006. Chile destina un 3% a salud mental, bajo el presupuesto óptimo que en países tales como Francia o EE.UU llega al 6% y 10%.
La falta de atención a los pacientes tiene consecuencias indirectas para el país, pues impactan a la productividad económica debido a la incapacidad laboral a la que se ven expuestos.
Para la Organización Mundial de la Salud, Chile sólo destina un 3% para las personas que tienen problemas psiquiátricos, es un muy bajo presupuesto si se compara con países tales como Francia o EE.UU donde llega a un 6% y hasta el 10%. Pese a los altos índices de suicidio y también al aumento de la depresión en adolescentes y jóvenes los recursos para esta área no aumentan, generando consecuencias indirectas para el país, pues impactan a la productividad económica debido a la incapacidad laboral a la que se ven expuestos.
En Chile, una de cada tres personas sufre problemas mentales a lo largo de su vida. En tanto durante los últimos años se ha observado un explosivo aumento en niños, jóvenes y adultos jóvenes. Estas patologías como es el caso de trastornos ansioso-depresivos, han provocado una mayor demanda de psicólogos y psiquiatras en el sector público, lo que provoca un crecimiento constante en la cantidad de licencias médicas a pacientes con dificultades psiquiátricos.
SALUD MENTAL VALDIVIANA EN PROBLEMAS
La situación presupuestaria para la salud mental en la Región de los Ríos, forma parte del deficiente panorama nacional que enfrentan los pacientes que acuden a centros psiquiátricos, pues no cuentan con los recursos necesarios para su correcto cuidado, complicación que desencadena en la no rehabilitación de los pacientes.
En Valdivia, se vive un escenario desolador pues hay 20 camas para pacientes psiquiátricos en el Hospital Regional. Es decir, pacientes con la misma patología pero pertenecientes a otras comunas de la región cuentan con escasas posibilidades de acceder a una de ellas, en casos críticos.
Un número considerable de esas camas disponibles son usadas por pacientes con problemas mentales que han tenido o tienen algún problema judicial en proceso, lo que limita las posibilidades de quienes acuden constantemente a este tipo de servicios.
El Doctor Tomas Baader. Director de la Alianza Contra la Depresión, comenta que es fundamental formar redes de apoyo para las familias debido a la faltan de camas para la atención infanto-juvenil, teniendo en cuenta que en Los Ríos las cifras de suicidio se han triplicado.
SUICIDIOS EN VALDIVIA
En el 2000, se suicidaron en el mundo 815 mil personas; es decir: una cada 40 segundos, convirtiendo al suicidio en la decimotercera causa de muerte a nivel mundial. En Chile el problema no es menos grave sobre todo en los adolescentes ya que la tasa de suicidios en adolescentes de 10 a 19 años aumentó de 5,7 a 7,0 por 100.000 habitantes entre el 2005 y 2010.
El suicidio es un problema pertinente a la salud pública, por lo tanto es imperativo el contar con todos los medios disponibles para poder prevenirlo y tratarlos a tiempo. Sobre todo si tenemos en cuenta que el 90% de los intentos de suicidios tiene estrecha relación con casos de problemas psiquiátricos como son la depresión, sindrome bipolar,etc. Siendo también como un factor importante en los casos de suicidios el consumo de alcohol y drogas.
Como ya se ah visto el suicidio e es un problema en crecimiento a nivel tanto nacional como regional y de no contar con los fondos necesarios para su debido diagnostico ,prevensión y tratamiento, solo podremos ver como seguimos subiendo los indices de suicidio adolescente siguen subiendo.
TESTIMONIOS DE VALDIVIANOS
Para los pacientes con escasos recursos contar con un centro de salud mental es de suma importancia para el desarrollo de su rehabilitación, es por ello que asistir al Centro de salud comunitario (Cesemco) permite a estos pacientes asistir semanal, mensual o periódicamente a sesiones con psiquiatras, psicólogos y terapias en conjunto con familiares para participar activamente del proceso.
Verónica Gutiérrez paciente de Cesemco comentó que la atención recibida ha ido no sólo en ayuda de su tratamiento sino también dice haber encontrado una segunda familia, asimismo añade “es importante el apoyo al paciente a lo largo del tratamiento”.
Mantener los recursos adecuados para este tipo de servicios, permite que los pacientes psiquiátricos se sientan acogidos y en proceso de mejora ya que muchos de ellos, consumen considerables dosis diarias de medicamentos y no contar con ellas significa un retroceso y en muchos casos la pérdida de algún paciente.
En el día internacional de la salud mental, el 14 de octubre, se realizó una marcha propuesta por la unidad psiquiátrica de la región en la cual participaron más 200 profesionales, de las áreas de medicina y psiquiatría así como también pacientes psiquiátricos de varias comunas. Esta actividad tenía entre otros motivos el concientizar a la población sobre los enfermos mentales existentes en la región haciendo un llamado a no excluirlos.
La marcha comenzó desde el hospital Regional hasta la plaza de la república, donde se aprovechó la instancia para tocar otros problemas que sufre el área de salud mental, como lo es la falta del equipo necesario para atender a sus pacientes; siendo la Región de Los Ríos uno de las regiones con mayor déficit y brecha en cuanto al equipamiento para salud mental y recursos humanos, poniendo un especial énfasis en la falta de camas para sus pacientes en las edades infantil juvenil.
Un problema alarmante si se tiene en cuenta que el 40% de los intentos registrados entre enero hasta septiembre de este año, corresponde a personas entre los 10 hasta los 19 años. Y que la Región no cuenta con ningún tipo de ayuda especializada o tratamiento para los menores de 15 años con patología psiquiátrica.
Esto se suma a que actualmente solo el 2% del presupuesto de la salud va al departamento de psiquiatría, haciendo imposible que se de abasto a las necesidades de sus pacientes.