Por María José Cárdenas, Sebastián Lizana y Cristobal Zavala.
Desde el año 2007 se empezaron a hacer preparativos para la construcción de 2 puentes que impactarán al humedal Angachilla. Uno que va desde avenida Ramón Picarte hasta Villa Las Mulatas, a cargo del SERVIU -Servicios de Vivienda y Urbanización- y otro desde puente Santa Elvira hasta Picarte a cargo del MOP -Ministerio de obras públicas-. Vecinos y organizaciones están en contra del proyecto, motivo por el cual se realizó una encuesta el día 22 de Abril -Día de la tierra- en que se reveló que una amplia mayoría estaba en contra del proyecto.
Este proyecto, que no contó con la aprobación de los vecinos -evidencia de eso es la encuesta- tiene por motivo ayudar a forestales en el traslado de troncos a los centros de chipeadoras, herramienta que convierte residuos en virutas o aserrín. Esto a pesar de la insistencia de que el proyecto es para mejorar la conectividad local, cuestión con la que los vecinos están de acuerdo, pero que debería respetar la biodiversidad local. Es de asumir que el proyecto no fue realizado teniendo en cuenta el bienestar de los vecinos en la zona, sino que un beneficio industrial. Siendo los vecinos quiénes más se preocupan por mantener su espacio, cómo menciona la vecina entrevistada, señora Cristina Miranda:
Igualmente, el rol que cumple el humedal dentro de la población es múltiple, ya que mantiene cierta ecología y diversidad biológica -hay 121 especies de fauna y 85 de flora- que podría estar amenazada por los rellenos al humedal. Esta cuestión se agrava si se tiene en cuenta que han sido ignoradas muchas peticiones por parte de los vecinos, incluida la encuesta. La situación de amenaza a las especies podría resultar en la muerte de las especies que habitan el humedal, señala Cristina Miranda:
Sin embargo, para una comprensión más compleja del tema, es necesario mostrar una serie de eventos que posibilitaron la situación actual. En que el proyecto aún no sale de licitación, el humedal fue nombrado santuario de la naturaleza y hubo una fuerte disrupción ciudadana a favor del humedal. Por lo que se mostrarán los hechos bien ordenados cronológicamente:
La intervención de los ecosistemas trae como consecuencia la extinción de especies de flora y fauna, sequía, propagación de virus y enfermedades en animales, entre otras consecuencias negativas. El calentamiento global es producto de este fenómeno cada vez más evidente. Las autoridades deben hacer caso a este llamado ciudadano que lleva años defendiendo el Humedal Angachilla.