El mar chileno es objeto de gran explotación. Dada su vasta extensión, el ecosistema marino significa una gran oportunidad de lucro para distintos agentes, desde grandes empresas de pesca industrial hasta caletas de pescadores artesanales y pequeñas comunidades costeras. Esto, sumado a factores sociales externos como lo son la crisis global económica, han causado sobrepesca, agotamiento de recursos y el colapso de ciertos ecosistemas marinos. Una de las especies más afectadas en Chile es el alga Macrosystis pyrifera o huiro.
Es de gran importancia conservar y proteger el huiro ya que no solo permite la extracción a largo plazo de pesca y recolección de recursos marinos sino que también cumple con roles ecosistémicos y sociales cruciales.
Esto se debe a que el huiro es una especie fundacional que modifica el hábitat y facilita el crecimiento de poblaciones de otras especies, como por ejemplo erizos, lapas, peces y especies mamíferas. Muchas de estas especies tienen una etapa de vida en forma de larva que les permite viajar mediante corrientes submarinas a otros sitios desde el bosque de huiro dado el efecto así llamado spill over o de “chorreo”.
Por lo tanto, en zonas en las que se protege el huiro podríamos esperar encontrar una mayor diversidad y abundancia de especies comerciales, permitiendo así la subsistencia y desarrollo económico de comunidades pesqueras artesanales. Dr. Nelson Valdivia, ecólogo dedicado al estudio de algas se refirió al tema:
¿Qué son los servicios ecosistémicos?
Infografía Educativa Masas de Agua Cuadrículas y Líneas Azules de Fotografia ValdiviaServicios ecosistémicos del huiro
El huiro es un alga que brinda muchos servicios ecosistémicos (SE). A continuación se enlistarán los más explorados, habiendo muchos más por describir.
Servicios ecosistémicos de soporte
El Alga entra en el ciclo del carbono como biomasa húmeda, detritus o materia orgánica disuelta, formando una fuente de alimento para una amplia gama de organismos. Como formadores de hábitat, un solo esporofito de algas proporciona directamente tres espacios primarios distintos: el soporte, el estípite y la lámina.
Esto permite que los microambientes emerjan como hábitats para especies de macroinvertebrados como los equinodermos, crustáceos, poliquetos, bivalvos, percebes y lapas. (Cuba 2022 p. 284, 285)
Servicio ecosistémico de regulación
Los servicios de regulación son constituidos principalmente como la producción de larvas que contribuye a la regulación y estabilidad del ecosistema marino. Regulan el hábitat de especies y organismos marinos, protegiéndolos y ayudando a su crecimiento y reproducción. Además, existen investigaciones señalan una relación entre la dispersión y la conectividad de larvas. Los esporofitos del huiro son hábitat de suspensívoros bentónicos (especies que se alimentan de organismos que flotan libremente en el agua) que contribuyen al reciclaje de nutrientes dentro del ecosistema.
Servicio ecosistémico provisional
El aprovechamiento del recurso a lo largo del SCH se basa en la cosecha y recolección de biomasa, convirtiendo a Chile en el principal país productor de materia prima. La biomasa de algas se destina a la producción de alginato, industria valorada en USD 213 millones anuales a nivel mundial. Solo en el norte de Chile, más de 11.000 personas dependen directa o indirectamente de la recolección y aprovechamiento de estos recursos. (Cuba 2022 p. 287, 268)
Servicio ecosistémico cultural
Un artículo colaborativo entre arqueólogos y ecólogos marinos discutió la influencia de los bosques de algas en la migración humana de Asia a las Américas cerca del final del Pleistoceno. El estudio mencionó que los bosques marinos proporcionaron áreas protegidas cercanas a la costa para la migración humana, por lo que fue más fácil para las personas navegar hacia mar abierto. Los bosques de algas también proporcionaron alimentos y materiales que los humanos podían conservar para sus viajes por mar (p. ej., las algas marinas se usaban para construir barcos).
Según los registros arqueológicos, se han encontrado algas parcialmente comidas y cocidas en un sitio de Chile de 14.000 años de antigüedad, lo que sugiere que las algas y la fauna asociada han sido parte de la dieta humana en el hemisferio occidental desde la antigüedad. Además, restos de algas, presumiblemente Macrosystis fueron encontrados en tumbas de las culturas Nazca (10 a. C.-700 d. C.) y Paracas (700 a. C.-200 d. C.), lo que revela la preferencia por las algas marinas en la dieta y prácticas de las antiguas sociedades costeras del Perú (Cuba 2022. P. 268)
Explotación del huiro
Según datos de Sernapesca, la extracción de huiro representó el 20,4% de las ventas y exportaciones agropecuarias y acuícolas en Chile, generando una ganancia neta de US $ 1.257,6 millones en el año 2020. Estas ganancias derivan de la exportación del alga a distintos países como China, Japón o Francia donde las suelen procesar para producir cosméticos y objetos de belleza.
El huiro se ha vuelto una alternativa de trabajo bastante atractiva ya que los compradores empezaron a pagar mejor por el kilo, produciendo un alza en la comercialización y por ende aumentando su extracción. Debido a este fenómeno aumentaron también los recolectores ilegales, quienes comenzaron a comercializar el huiro de manera desregularizada con empresas moledoras de algas. (Fossa, 2020.)
Protección de recursos marítimos en Chile
Hoy en día existen distintas formas de preservar el ecosistema marino, ya sea con la veda, que funciona como la práctica de término del cultivo, las leyes de Sernapesca que buscan la regularización y fiscalización mediante la medición de las áreas de manejos para recolectar estos recursos, y también dentro de los propios sindicatos de pesqueras artesanales existen métodos propios del cuidado del mar. Aun así, estas medidas no han sido parte de la legislación de nuestro país durante mucho tiempo.
Para el caso del huiro estos métodos de protección de las áreas de manejo han demostrado ser poco eficientes, por lo que los ecosistemas requieren de cambios transformadores a nivel de gobernanza. Para esto se necesita incentivar el conocimiento sobre los SE a nivel local. Existe un vínculo entre los ecosistemas y bienestar humano, por lo que estas transformaciones se deben deben estar conectadas a los cambios sociales. (Gelcich. et al. 2010)
Los elementos críticos para lograr este cometido son los siguientes:
- Reconocimiento del agotamiento de las reservas de recursos
- Definir los SE que brindan los bosques de huiro.
- Incentivar el conocimiento científico sobre la ecología como también la resiliencia de las especies objeto de explotación y su papel en la dinámica de los ecosistemas.
- Ensayos experimentales a escala de demostración, basados en experimentos científicos a menor escala, para mejorar la cooperación entre científicos y pescadores.
El futuro del huiro
Si no existe un cambio importante en su gobernanza, podríamos enfrentar severas consecuencias ambientales. Se agotarían los servicios anteriormente nombrados, como por ejemplo en la zona norte del país donde el huiro es explotado indiscriminadamente. Es de vital importancia generar conciencia sobre el rol ecosistémico y los SE que éstos brindan para así promover la protección y defensa de nuestro ecosistema marino.