Por: Diego Carrasco
Jorge Teillier, uno de los grandes exponentes de la poesía lárica, defendió una visión profundamente enraizada en la vida rural. Su famosa frase «El poeta escribe para que lo lea un joven de provincia» encapsula su filosofía. Para Teillier, la provincia no solo es un lugar geográfico, sino un espacio espiritual donde aún es posible conectar con lo esencial, lejos del bullicio urbano. Inspirado por el entorno rural y las interacciones cotidianas que observaba en bares y plazas, su poesía busca redescubrir la belleza en lo simple, invitando al lector a reflexionar sobre la vida, la memoria y la nostalgia.
La poesía de Teillier sigue resonando, especialmente en una era donde la vida moderna tiende a desconectarnos de lo esencial. Su apuesta por el joven de provincia es, en realidad, una invitación para todos nosotros a redescubrir la belleza en lo cotidiano, a observar el mundo con nuevos ojos. Su obra proyecta un futuro donde las ciudades no acaben con la sensibilidad y la reflexión, y donde las generaciones venideras encuentren en la poesía un refugio ante la velocidad del mundo moderno. Teillier nos recuerda que en lo simple, en lo pequeño, reside lo más grande.