Bernardo Berger, diputado de la Región de Los Ríos: “La capacidad de las autoridades del SLEP para dar respuesta oportunas a los reclamos ha sido bastante débil”

Exalcalde Berger criticó la gestión de la directiva del SLEP Valdivia, señaló deficiencias estructurales y su posible impacto en la educación pública regional

Por Amaru Alfaro, Oliver Muñoz, Amaro Rivera, Katalina Rosas, Valentina Wetzel.

La implementación del Servicio Local de Educación Pública (SLEP) ha generado una serie de opiniones y polémicas acerca del funcionamiento eficiente de la educación pública, a nivel regional y nacional. La finalidad de esta entrevista es proporcionar información sobre el estado actual con respecto al funcionamiento del SLEP a nivel local, profundizando en la gestión y las críticas que existen de su funcionamiento.

Bernardo Berger fue alcalde y concejal de la ciudad de Valdivia. Fotografía de Autoría propia.

Bernardo Berger, diputado independiente por el Distrito N°24, ha criticado activamente la situación a nivel regional, dejando en evidencia la débil respuesta y poca eficiencia de las autoridades a cargo, mediante oficios que abordan las deficiencias y efectos adversos que ha tenido la comunidad educativa.

La implementación de este modelo educativo ha generado diversas opiniones desde el inicio de este año escolar. El Diputado ha ejercido su rol de parlamentario, vinculado a la fiscalización, destacando las deficiencias en el funcionamiento del sistema educativo y criticando la gestión por parte de funcionarios.

¿Cuáles considera que son los elementos estructurales o de fondo en la administración del SLEP Valdivia que están generando controversia?

Considero que hay dos elementos claros, donde surgen problemáticas evidenciadas hasta el momento. Uno es la planificación, y el otro es la capacidad de gestión. Si estos no están coordinados, difícilmente se puede lograr un buen desarrollo de las actividades que están planificadas. Por ejemplo, se ha evidenciado una falta de planificación y gestión en unidades como infraestructura, equipamiento y recursos humanos.

¿Qué acciones adicionales, más allá de la fiscalización, tiene pensado emprender desde su rol parlamentario para asegurar que se corrijan estas falencias?

Ya están surgiendo iniciativas y proyectos de ley en el parlamento para corregir estas falencias, que no solo ocurren en la región de Los Ríos, sino también en otras regiones. Existe una discusión sobre el modelo del SLEP en general, y tanto parlamentarios como el poder ejecutivo, a través del Ministerio de Educación, han mostrado disposición a levantar propuestas para mejorar el modelo.

¿Cuál es su perspectiva sobre la autoevaluación positiva que hizo el director ejecutivo del SLEP Valdivia, a pesar de las numerosas denuncias de la comunidad educativa?

Para mí fue bastante sorpresivo, desconcertante, y también, de alguna forma, sentí que está bastante desconectado. Yo opino que debería asumir sus errores con humildad, y buscar cuáles son las mejoras que ellos están obligados a realizar para subsanar estas deficiencias, las que deben ser abordadas con cierta seriedad y urgencia.

Bernardo Berger, despachó cuatro oficios exigiendo soluciones urgentes y una de mayor fiscalización a los representantes de la educación del país. Los documentos emanados fueron enviados a la contralora General de la República, al ministro de Educación, al superintendente de Educación, y al director ejecutivos del SLEP Valdivia.

Impacto en la comunidad educativa y búsqueda de soluciones

Los problemas reportados en la administración del SLEP, desde la falta de insumos hasta las precarias condiciones laborales, tienen un impacto directo en el día a día de estudiantes, docentes y asistentes de la educación, afectando tanto su bienestar como el proceso de aprendizaje.

Los reportes sobre falta de calefacción, plagas y problemas de seguridad dibujan un panorama complejo, ¿Cómo cree que este ambiente está afectando no solo el aprendizaje formal, sino también el bienestar emocional de los estudiantes y docentes de Valdivia?

Un ambiente complejo como el descrito afecta directamente el clima laboral en las unidades educativas. Cuando hay docentes a quienes no se les pagan bonos o asistentes de la educación sin asignaciones, el trabajo no se realiza con agrado ni comodidad. Esto deriva en paralizaciones de actividades que, a su vez, provocan un retraso en la aplicación del programa de estudio de los alumnos.

¿Cómo valora la capacidad de respuesta y la eficiencia de los canales de comunicación y denuncia habilitados por el SLEP Valdivia para que la comunidad educativa informe y reciba soluciones a sus problemas?

Considero que la capacidad de las autoridades del SLEP para dar respuestas oportunas a los reclamos ha sido bastante débil. La parte comunicacional deja mucho que desear, lo que se evidencia en la falta de comunicados claros y en la ausencia de respuestas a los oficios enviados.

Desde su perspectiva, ¿Cuál es el costo a largo plazo para la educación pública de Valdivia si no se logran resolver los problemas de infraestructura y las denuncias de plagas en los establecimientos?

El costo a largo plazo recae principalmente en los estudiantes. Las paralizaciones de actividades en los colegios significan un retraso en el cumplimiento del programa de estudios. Además, situaciones como las plagas pueden representar riesgos sanitarios y afectar la seguridad de la comunidad educativa, lo que requiere respuestas más rápidas.

Análisis del modelo SLEP y perspectivas a futuro

La implementación del modelo SLEP a nivel nacional ha generado un debate sobre su efectividad y sostenibilidad. Las experiencias de Valdivia y otras regiones impulsan la reflexión sobre los ajustes necesarios para el futuro de la educación pública.

Inicialmente, ¿Qué se buscaba con la implementación del SLEP?

La visión detrás de este cambio era, precisamente, que la educación municipalizada regresara nuevamente a lo que es el Ministerio de Educación. Fue, sin duda, un anhelo histórico que los profesores impulsaron activamente. Lamentablemente, parece que el remedio está saliendo peor que la enfermedad.

¿Cree usted que el modelo de implementación de los SLEP a nivel nacional debería ser revisado integralmente?

Sí, debería ser revisado. De hecho, hubo una fuerte presión parlamentaria para no asignar más presupuestos a la implementación de nuevos SLEP hasta que se realice un estudio y evaluación profunda para identificar y corregir las debilidades del sistema.

¿Cree que el modelo SLEP puede llegar a ser una solución efectiva y sostenible para la educación pública en Chile?

Personalmente, pienso que sí. Se debe hacer una evaluación profunda y realizar las modificaciones necesarias. Aquí es donde los técnicos y especialistas en educación deben intervenir para identificar las debilidades y transformarlas en fortalezas. Esto seguramente implicará modificaciones a la legislación existente. De hecho, el Ministro de Educación se comprometió a presentar iniciativas para mejorar las debilidades del sistema actual.

Los sucesos ocurridos en la región pueden convertirse en un punto de inflexión para construir un sistema más eficiente en la escolaridad local, regional, y nacional. El crítico diagnóstico entregado por Berger refuerza la necesidad de un debate legislativo profundo sobre el futuro del modelo SLEP. Además de la fiscalización, el Congreso tiene hoy la responsabilidad de liderar cambios para mejorar la educación pública.