Terremoto 19 de Septiembre: La solidaridad de un pueblo

El pasado 19 de septiembre se registró un terremoto con una magnitud de 7,1 en escala de Richter, localizado al límite estatal entre los estados de Puebla y Morelos, a 120 km de la Ciudad de México.

La ciudad más afectada por este suceso fue la Ciudad de México, la cual había sufrido un acontecimiento similar justamente 32 años atrás.

Las cifras dadas a conocer por parte del Sistema Nacional de Protección Civil de México dan un total de 305 decesos; 167 fueron en la Ciudad de México.

Minutos después del terremoto la solidaridad de la población salió a flote de manera espontánea, ya que personas que pasaban caminando por algunos puntos de la ciudad donde hubo edificios dañados o que cayeron en su totalidad, no dudaron ni un segundo en ayudar a las personas que quedaron atrapadas bajo escombros, moviendo bloques de cemento, haciendo cadenas humanas, movilizándose para conseguir víveres, dándole techo a miles de personas afectadas, abriendo sus redes de wifi para que hubiera mejor comunicación entre todos, debido que las redes de comunicación fallaron.

Las redes sociales sirvieron como herramienta de coordinación y comunicación, ya que se daba a conocer qué y dónde se necesitaban víveres, herramientas para demolición, medicamentos, relevos y se difundían fotos de personas desaparecidas.

A continuación, los testimonios de mexicanos que vivieron de cerca esta catástrofe.

Karla Suárez, estuante y bailarina mexicana, que actualmente reside en la Ciudad de México.

Santiago Ulloa, actor y artista visual mexicano, que actualmente reside en la Ciudad de México.

Luis Antonio Guadarrama Rodríguez, comerciante y músico mexicano, originario de la ciudad de Toluca, la cual está a aproximadamente a 1 hora de la Ciudad de Toluca.

Pero no solo fue la ayuda del pueblo mexicano, también hubo ayuda por parte de diferentes países: Chile, Japón, Alemania, Colombia, España, Canadá, Honduras, Ecuador, El Salvador, Estados Unidos, Guatemala, Venezuela, Israel, entre otros.

Cabe destacar que Chile y Japón, se encuentran en zonas de alta actividad sísmica, por lo que son expertos en rescate en derrumbes, valoración de daños y conocimientos en tema de infraestructura, pero no solo eso, también entienden la preocupación ocasionada por un hecho similar.

Esta es una prueba más de que México es una nación solidaria, llena de amor y con ganas de salir adelante sin importar las adversidades.