Por Jaqueline Moraga y Francisca Rose
Desde el retorno a la democracia, hemos visto como el universo político en Chile se ha ido fragmentando y dando origen a nuevas fuerzas emergentes, muchas de ellas, como consecuencia de conflictos sociales de corto o largo plazo en los cuales un grupo logra consolidar un ideal colectivo respecto de las expectativas políticas de la época basado principalmente en características identitarias de los miembros que lo conforman.
Este escenario ha causado que muchas de estas colectividades no perdure a lo largo del tiempo, extinguiéndose al momento de lograr los objetivos que su causa demandaba, tras disiparse la identidad que los caracterizaba o simplemente «arrastradas» por la agenda comunicacional que da paso a nuevas temáticas.
Es así como el mapa político ya no sólo cuenta con los tres puntos denominados como la derecha, el centro y la izquierda y las variantes de «centro-izquierda/derecha» ya no son lo más novedoso.
Se suman a este mapa las definiciones de «ultra» como referente a las ideologías «duras», que apelan a la tradición y los principios básicos de cada sector, criticando los difusos limites que hoy representa cada lineamiento y también se da paso a las coaliciones, unión entre partidos políticos usualmente ligadas a una misma corriente ideológica, como respuesta a la fragmentación propia de la época.
Las principales coaliciones chilenas actuales son la «Nueva Mayoría» compuesto por el Partido Comunista, el Partido Socialista, la Democracia Cristiana y el Partido Radical; «Chile Vamos» conformado por la Unión Demócrata Independiente, Renovación Nacional, Evópoli, y Partido Regionalista Independiente. Esto hacía que el escenario fuera un dupolio chileno en el que sólo habían dos direcciones. ¿Qué sucedió a partir del 2016?
El frente amplio hace su aparición en la esfera política como una nueva coalición e ingresa al espectro comunicacional a partir del año pasado, esta nueva coalición nace de un sector del padrón electoral principalmente joven y los partidos que lo componen surgen desde movimientos universitarios, principalmente de las manifestaciones por la educación de los años 2006 y 2011, miembros de la ex «revolución pingüina» y estudiantes actuales unidos principalmente por esta causa. Los partidos que respaldan esta iniciativa son Poder Ciudadano, Movimiento Autonomista, Revolución Democrática, Nueva Democracia, Partido Liberal, Ecologista Verde, Humanista, Igualdad, Izquierda Autónoma, Izquierda Libertaria, Partido Pirata, Socialismo y Libertad, Partido Democrático Popular y Democrático Progresista.
El ideal colectivo de este nuevo ente político tiene como objetivo, según sus propias palabras, ser una «alternativa al modelo político existente y generar una tercera vía» esto principalmente para quienes se ven desencantados de la política actual y han sido víctimas del desgaste del proceso de transición del país.
Primeras elecciones como conglomerado
Debido a que el lanzamiento oficial del Frente Amplio como coalición fue solo a principios de este año, las cartas para validarse y mantenerse en la esfera política nacional estaban puestas, en gran medida, en las elecciones recién pasadas. El 19 de noviembre, en las elecciones parlamentarias y primera vuelta presidencial, debieron poner a prueba a sus candidatos y candidatas, en miras de lo que será el futuro del Frente Amplio.
«El Frente Amplio llegó para quedarse», fueron las conclusiones de Sánchez y Boric luego de conocer los resultados, los cuales les permiten tener una bancada Frente Amplio compuesta por 20 diputados y 1 senador, que los representará en el Congreso Nacional.
Respecto a los resultados de la primera vuelta de las elecciones presidenciales y parlamentarias de este año consultamos a la ahora ex-candidata a diputada por Los Ríos y militante de «Nueva Democracia» -partido que forma parte del Frente Amplio- respecto a sus sensaciones y conclusiones del proceso, marcado de forma especial por la controversia ante los resultados de las encuestas CEP y su distancia ante los resultados reales.
En relación al panorama como coalición, Carla nos dio a conocer los resultados de reuniones en las que todos los partidos han conversado su futura postura en la segunda vuelta.
La ex candidata a Diputada también comentó sobre la postura que tomará la Nueva Democracia con respecto al apoyo al candidato Alejandro Guillier para la segunda vuelta.
Valdivia se ha caracterizado por elegir a candidatos identificados como parte del sector «derecha», frente a este escenario los resultados han ido cambiando con el paso del tiempo y en la última elección pudimos ver como partidos tradicionales se han visto en riesgo ante la irrupción del frente amplio. ¿Valdivia se abre a lo nuevo?
Como podemos observar, el frente amplio es una nueva fuerza política que al parecer llegó para quedarse a pesar de los rumores colectivos que giran en torno a ellos a causa de su falta de experiencia en la temática, esto deja en claro que nos encontramos en períodos de cambios en los que hay lugar para lo emergente.