Por Marcelo Cea, Antonia Muñoz, Johans Navarrete, Fabiola Solís y Sofía Ulloa
Sin duda alguna, el deterioro de la salud mental ha sido uno de los efectos más notorios de la pandemia. Las cuarentenas, el teletrabajo, e incluso el estallido social, son los principales factores en el incremento del estrés y ansiedad en los chilenos y chilenas.
Un estudio realizado por la Asociación Chilena de Seguridad, junto al Centro de Encuestas y Estudios de la Universidad Católica, reveló que un 46% de los encuestados presentaron algún síntoma depresivo el último mes. De los cuales, un 29% corresponde a quienes tienen un trabajo estable actualmente, y un 50% corresponde a quienes se encuentran desocupados. De esta forma, se concluyó que el desempleo y la incertidumbre laboral son un factor importante en el deterioro de la salud mental.
A causa de la pandemia y las largas jornadas laborales de quienes trabajan dentro del área de la salud, las licencias, y las horas para pedir ayuda psicológica, aumentaron drásticamente. Y es que, a pesar de la crisis sanitaria y los extensos periodos de confinamiento, el porcentaje de suicidios en el 2020 ha sido el más bajo registrado hasta ahora. Durante el mismo año, se registraron a nivel nacional alrededor de 1.590 suicidios.
Cobertura de salud mental
Una investigación realizada por BioBioChile, expuso que de los 2.438 psiquiatras del país, solo 53 tienen convenio con el Fondo Nacional de Salud, Fonasa. Esta situación deja en evidencia otro gran problema en términos de salud mental en el país: la falta de cobertura en el sistema de salud.
La misma investigación expone que una consulta psiquiátrica sin bono ronda los $80.000. Mientras que con convenio Fonasa, la misma consulta, costaría entre 6 mil y 12 mil pesos chilenos.
Actualmente, del presupuesto total del área de salud en Chile, alrededor de un 2,4% es destinado a salud mental, cifra que se encuentra muy por debajo del 6% recomendado por la Organización Mundial de la Salud. Las Garantías Explícitas en Salud (GES), del sistema chileno, solo cubren cinco patologías mentales: depresión, esquizofrenia, dependencia al alcohol y drogas, trastorno bipolar y Alzheimer.
Cada año cerca de 1.800 personas mueren por suicidio en Chile. Las cifras más altas están concentradas principalmente en la Región Metropolitana, la Región de Valparaíso y la Región del Bio-Bio.
En la actualidad, se estima que alrededor de 7.700 personas aún se encuentran en lista de espera para agendar una hora al psiquiatra en Chile.
Reportaje Hipermedia – Made with Moovly
Salud mental, propuestas y políticas públicas
Las cifras han aumentado y los chilenos cada vez ven más afectada su salud mental, aumentado el interés en este tema. En consecuencia, esta problemática se ha vuelto fundamental para los actuales candidatos a la presidencia y sus programas de gobierno, pero, ¿qué dicen al respecto?
Por un lado, el candidato de Apruebo Dignidad, Gabriel Boric, en su programa de gobierno propone crear un plan de recuperación de salud mental. El que se llamaría «Tejiendo Cuidados», el cual en palabras de Boric, pone énfasis en un acceso universal y con mayor cobertura.
Junto con lo anterior, Boric propone, además, aumentar el presupuesto de salud mental y crear una campaña comunicacional para el cuidado de esta.
Por otro lado, el candidato del Frente Social Cristiano, José Antonio Kast, aseguró que: “La salud mental de los chilenos está en grave riesgo por la pandemia. Cientos de miles de atenciones no se han realizado, factor que agrava mucho más una realidad que ya es precaria. Es urgente un plan de acción para enfrentarla”.
Dentro de las ideas propuestas por Kast se encuentra fortalecer el modelo comunitario en la prevención, tratamiento y rehabilitación en personas con trastornos ligados a la salud mental.
¿Qué medidas se necesitan implementar para mejorar la salud mental de los chilenos y chilenas? Elisa Ansoleaga, psicóloga y académica de la Universidad Diego Portales, mencionó en el conversatorio «Salud mental en Chile hoy», organizado por la misma institución, que necesita una política que garantice la equidad, garantía, expectativa e infraestructura en salud mental.
La incorporación de la salud mental, su prevención y sus riesgos, dentro de los distintos espacios colectivos que nos rodean, constituye uno de los puntos base para generar conciencia y quitarle, a la salud mental, el prejuicio y el estigma que existe sobre ella de encima.
Actualmente, diversos profesionales del área han acusado un constante vacío jurídico en términos de políticas públicas que mantengan y aseguren, el acceso a una salud rápida, accesible y de calidad, tanto como en salud mental como en no.
Reiner Fuentes, psicólogo clínico y Pollet Simao, estudiante de arquitectura, ambos integrantes del grupo de apoyo en salud mental de la Universidad Austral de Chile, «Centinelas», señalan que actualmente el país se encuentra en una deuda profunda con la salud mental tanto en términos de cobertura, como de acceso y prevención.
Sin duda alguna, la falta de políticas públicas con enfoque de salud mental sigue siendo un tema de alta urgencia que debe ser tratado con rapidez y eficacia.
Aumento de intentos de suicidio en la Región de los Ríos
Aunque la tasa de suicidios ha disminuido durante el último par de años, no se pueden descuidar las cifras que aún se hacen presentes. Durante el 2020, los intentos de suicidio en la Región de los Ríos y Los Lagos aumentaron drásticamente en comparación con cifras de años anteriores.
Durante la conmemoración del Día Internacional de la Prevención del Suicidio, la Seremi de Salud de Los Ríos, Carmen Riquelme, reveló que en 2019 se registraron 201 intentos de suicidios en la Región, cifra que en 2020 aumentó a 288.
Según un informe de la Mesa de Vigilancia Suicida de Valdivia, al menos una persona piensa en suicidarse diariamente en la Región. Además, se reveló que el rango etario de las víctimas se encuentra entre los 15 y 19 años. Estas cifras resultan preocupantes, más aún si se considera que las victimas representan casi un 9% del total de la población.
Durante julio, se realizó la campaña “Hablemos de salud mental” organizada por la Seremi de Desarrollo Social y Familia de la región, Ann Hunter. Esta campaña tuvo la finalidad de incentivar la protección de la salud mental en niños, niñas y adolescentes en pandemia.
La terapeuta ocupacional y profesional del Centro de Salud Mental Integral «Kintsugi», Lorena Molina, asegura que actualmente no existe suficiente educación ni difusión de información con respecto a la salud mental en las instituciones educacionales.
Con respecto al aumento en la tasa de suicidios, Molina menciona que la validación y la escucha activa, forman parte del proceso de acompañamiento que se le puede brindar a alguien que se encuentra pasando por situaciones difíciles y dolorosas.
El 17 de mayo pasado, el Presidente de la República, Sebastián Piñera, anunció la publicación de una Ley de Protección de Salud Mental. Esta medida tiene como objetivo velar por los derechos de quienes padecen enfermedades y/o discapacidades mentales.
Chile está al debe con la salud mental. Por está razón, es necesario implementar políticas públicas y sociales que faciliten el acceso a una salud de calidad. Urge un mejoramiento al sistema de salud, que permita un acceso igualitario a este servicio y que termine con las listas de espera.