La decepción tecnológica en la cura del VIH

En lo que vamos del siglo XXI tecnología ha generado una evolución muy abrupta, sin embargo, el avance de medicinas para síndromes o enfermedades en el mundo ha dejado mucho que decir, en este sentido hay una en especial que me genera ruido por los datos que se han arrogado durante los últimos años, hablo del VIH/SIDA.

Muchos medios chilenos hablan de la explosión de esta enfermedad y  que se le ha perdió el respeto, el VIH no discrimina por clases sociales, sexo ni edad, a pesar de todo cCurimil_ Nubeconsidero que se trata del tabú o del miedo que antes había para realizarse el examen, lo que no permitía generar los datos que hoy se obtiene, sobre todo en los jóvenes del país.

Un dato que respalda lo mencionado se obtiene por cifras oficiales publicadas en un reportaje de TVN, donde expone que cerca de 100 jóvenes se contagia del Virus cada semana en Chile. ¿Acaso lo jóvenes no generar conciencia? ¿Quizás en la sociedad actual el VIH esta normalizado?, la falta conciencia de la sociedad sobre estos temas son determinantes, los jóvenes demuestra, con datos, que no está siendo precavidos durante su actividad sexual.

 

La difusión de los métodos preservativos está aún en pañales por la forma en que se realizan, si bien existen agrupaciones independientes al estado que hacen un trabajo muy potente para prevenir estos números alarmantes, es el mismo estado quien tiene que velar por el bien estar de los ciudadanos, VIHdemostrándolo en instancias como estas.

Si bien existen muchas sugerencias de cómo prevenir o identificar el virus, ya sean preservativos femeninos y masculinos, pareja única, realzarse el examen habitualmente o establecer el famoso test rápido, el gran problema de virus es la sociedad que lo condena poco menos a una muerte segura o a un arma mortal de contagio, el portado de VIH es un persona como todas las demás con una enfermedad, que solo atreves de muchos medicamentos puede “normalizar” su situación, pero el único síntoma que aún no se puede controlar es la Condenación social.